Desde que una chica cualquiera me besa, hasta que me abandona, empieza a importarme y acaba finalmente ocupando mi prosa; dejo secarse, agonizar, pudrirse el (siempre demasiado, imperdonable) tiempo. Soy un tipo de acción, yo. Y de reflejos, qué reflejos. Lo que quiero decir es que soy imbécil cuando respondo que sí, que sigo escribiendo.
NO SOY ENRIQUE VILA-MATAS: Montero Glez.
-
Los cincuenta y cuatro artículos que contiene *No soy Enrique Vila-Mata*s
(escogidos con mimo para la ocasión) trazan, página a página, un viaje a
través...
Hace 9 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario