lunes, 2 de noviembre de 2015

"Nothing to declare"

Los aeropuertos y los hospitales no sólo tienen en común las despedidas.

(Leo en la puerta de embarque Ya nadie se llamará como yo, de Agustín Fernandez Mallo: "El silencio con el que se lee un libro guarda relación -por no decir que es el mismo- con ese otro silencio que aparece cuando se cuida a un enfermo terminal")

No sólo la absurdidad de las instrucciones teatralizadas por personal uniformado (en caso de emergencia). Ni la aparente y excesiva tranquilidad de las tiendas duty free (casi una sedación química inadvertida, fluyendo en perfusión contínua por el hilo musical), de esas que en ocasiones anteceden a las tragedias. Tampoco el mensaje irónico y desolador "nothing to declare" al final del pasillo, tras el aterrizaje en otra realidad, después de un apacible trayecto.

(Leo:
"También el perfume de las flores en realidad es el proceso de putrefacción de sus pétalos."

"La más vasta manifestación del realismo resulta de extrapolar estadísticas hacia el futuro. La más ingenua manifestación de nostalgia, de extrapolar esas mismas estadísticas hacia el pasado. Las parejas se separan. No lo saben, pero cada uno se lleva una parte."

"El tiempo es la casa de quien no tiene otro lugar. Pero el lugar es la casa de aquel que se ha visto defraudado por el tiempo"

"...a menudo pienso que no es la vigilia quien conduce los sueños, sino al contrario, fue creada parea ilustrarlos."

"Desde que en 2013 se confirmó la existencia del bosón de Higgs, el vacío no es la nada, sino un lugar lleno de partículas. Queda así la nada reservada para el lenguaje de la poesía, las religiones, el ámbito de lo que algunos llaman lo difuso. La realidad, por mediación del lenguaje, como un río se ha creado a la vez que escindido. Ello me plantea un problema, radical duda que se hunde en el lodo de mi lenguaje aprendido:
buscarte en el vacío o en la nada, en cuál
estás tú ahora.")

Los aeropuertos y los hospitales no sólo tienen en común las despedidas. Me refiero a esa extraña difusión de neutralidad. Esa iluminación tenue y atemporal, como insomne. Ese halo de absoluta asepsia emocional, inquietante, casi extraterrestre. Son los aeropuertos sedes encubiertas de la completa erradicación de pulsiones humanas.

Y la melancolía es un cuchillo inútil en la mirada o no es.
Seré por tanto hipertextual o no habré sido nunca.

Es noche de otro 31 de octubre celebrando tu muerte viviente en mi cabeza. Para poder mirarte a los ojos y acabar de una vez (sin tu permiso) este libro y este vuelo de regreso a una vida en la que no obtendré nada por lo que no haya luchado.

La melancolía es un cuchillo inútil en la mirada que no quieres volver a manchar. Última llamada para los pasajeros del vuelo 5317 de RyanAir con destino a Santiago de Compostela, embarquen de forma urgente por la puerta C41.

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